Villa Mercedes: el violador en segundo plano

Seguridad violada

No entienden, no aceptan, son intolerantes. Así se muestran los funcionarios de la ciudad de Villa Mercedes ante los hechos sucedidos en la última semana en esta ciudad conmocionada.
Pero la orden fue impartida seguramente desde arriba, fue el gobernador, como es costumbre en esta provincia, el que fijó la estrategia después de la furia popular que destruyera el edificio donde funciona "la Justicia".

Alberto Rodríguez Saá llamó a su flamante ministro de Seguridad Angel Rafael Ruiz, para indicarle cómo debían proceder, ya que él (Alberto) se preservaría en silencio.
Todos los funcionarios desde Ruiz hacia abajo debían salir a declarar en discurso unificado, que los disturbios del sábado pasado fueron obra de "agitadores profesionales" o activistas.
El mandato tenía como premisa localizar dirigentes sociales o políticos opositores que hubiesen estado en las marchas de protesta o en los disturbios.

No se entiende como el borocotizado Ruiz en esta provincia tiene tanto micrófono para difamar. Cómo creerle a alguien que hace de la traición su práctica cotidiana.
Angel Rafael Ruiz, ocupó desde 1983 diferentes cargos como Vice Gobernador, Ministro de Gobierno, legislador del P.J., siempre alineado con la familia gobernante. Después se convirtió en menemista, ocupando la presidencia de Puerto Madero en Buenos Aires, para ser veedor del riojano en la interna cordobesa del P.J.

Pensar que el actual ministro de Seguridad, antes de tener la flota de vehículos que muestra sin ningún tapujo, en los que se cuenta el auto de colección que llevó al último Rally, sólo tenía un modesto Fiat 600, de esos primeros fititos que abrían su puerta hacia adelante. Pero claro, esto fue antes de entrar a la función pública.

Luego de su paso por el menemismo, dedicó su tiempo a la exclusiva actividad del mundo automotor, disfrutando de los ahorros que le produjera su extensa actividad pública.
Cuando creyó que el régimen caía, Ruiz se hizo obsesivo opositor al régimen de la familia Rodríguez Saá, la misma familia que le había posibilitado su crecimiento, político-económico.
El actual ministro junto a un conjunto de peronistas arrepentidos, armaron una agrupación y anunciaron con bombos y platillos su decisión conversa.

Agitadores, infiltrados o activistas profesionales, son las expresiones elegidas para acusar a un puñado de dirigentes y periodistas de instigadores y responsables de los desmanes.
¿Serán estas profesiones enseñadas en la virtual universidad de La Punta?, nos preguntábamos entre militantes.
Han sido su hermana Mary y su esposo el Intendente municipal Raúl Merlo, los que en conjunto con un puñado de dirigentes de segunda línea, más los periodistas oficialistas, los encargados de desparramar esta consigna.

Para su satisfacción, pareciera ser que en parte la estrategia ha dado resultado, porque la inseguridad sigue latente, porque el o los violadores no aparecen y los sectores que tenían el compromiso de realizar la marcha de este Martes a las 20,00 por pedido de seguridad, hicieron conocer a través de un comunicado de la facultad local (FICES), que la marcha se suspendía porque no se aseguraba la integridad de los estudiantes. ¡¿Cómo?! : si así como está escrito, "una marcha convocada para pedir por seguridad, es suspendida por falta de seguridad". (Entonces marcharemos cuando haya seguridad, pero deberemos cambiar de consigna, dijeron dos madres que llegaron a la Plaza y que no conocían la mala nueva).

Pero esto es San Luis y es así como suceden los acontecimientos, uno se esmera en relatarlos de la manera más gráfica y aportando los datos mas precisos, conociendo de antemano, que será tratado de díscolo o agitador profesional.

Cual si fuese un culebrón, habrá que esperar por un nuevo capítulo, manteniendo alerta a una platea que a veces llora, a veces ríe, que durante muchos días se adormece y de vez en cuando estalla sintiéndose protagonista. La trama, suena compleja, el final imprevisible.

Jorge Fernando Daffra
militante no egresado
21 - Noviembre - 2006